¡Buenos días amig@s! Vamos a por el viernes con alegría
El tío José González, que llega tarde a comer, la familia está hambrienta esperándole.
— ¡Pero cómo has tardado tanto!, ¿Dónde estabas? — dice su esposa
— En el sicólogo, que me ha quitado las ganas de fumar.
— ¡Pero si estás fumando
— Ya, pero sin ganas.
El niño se niega a comer. Dice que ya está harto de que le pongan donuts en el desayuno y el padre, conciliador, le dice a la madre:
— María ponle un huevo frito al niño.
El niño:
—¡Ayyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy!.
—¿Pero qué te pasa niña, por qué lloras? —pregunta el jefe.
—Porque no no veo a los payasos que dice mi papá que trabajan
con él .
El jefe mira con ira a su subordinado y le dice:
—Ya hablaremos sobre esto. Cada día se parece usted más a un calcetín
— ¿Un calcetín, yo..?
—Sí, solo sirve para meter la pata
—Perdone, jefe es que tengo un grave problema. Anoche fui a ver a un abogado.
—¿Y cómo le fue?
—Ahora tengo dos problemas.
—¡Está usted loco, señor mío!
—¿Loco yo? Yo me veo muy saldable.
—¿En qué lo nota?
—En que por la calle todos me saludan
—Usted no sirve para nada, solo hace reír a su compañeros cada vez que tropieza y se cae por las escaleras. Señor González:¡Váyase!
No hay comentarios:
Publicar un comentario