Hacía tiempo que deseaba viajar a Lorca para abrazar y
animar a mi amiga Amor Hernández, pero ésta se negaba a recibir visitas
mientras estuviera recibiendo los embates de la terrible enfermedad que ha destrozado su
futuro profesional y con ello su vida. Es ahora cuando ella anuncia que ha
vencido al enemigo que la mantenía postrada, que me apresuré a ir a verla.
Sin pensarlo dos veces, mi esposa y yo decidimos tomarnos dos semanas de vacaciones pasando por Lorca para ver a nuestra querida amiga, y continuar luego el viaje hasta la Comunidad Valenciana para pasar unos días con la familia.
¡Qué alegría al encontrarnos! ¡Amor estaba guapísima! Igual que antes de que el monstruo la atacara.
¡Qué alegría al encontrarnos! ¡Amor estaba guapísima! Igual que antes de que el monstruo la atacara.
Evidentemente, su durísima batalla contra el mal ha dejado
secuelas en su cuerpo y alma, que espero con el tiempo se subsanen.
He comprobado que cada vez que programo los viajes con
antelación algo sucede que me lo echa a perder. Por eso esta vez fue pensarlo y hacerlo sin avisar para darle la sorpresa.
Pero ya lo he dicho varias veces: yo voy a la playa y ese día
no hay agua.
El trayecto fue desagradable por el temporal de lluvia y
nieve que nos cogió por la provincia de Granada. Yo no llevaba cadenas y conducía
preocupado. Me enteré por la radio de que el Puerto de la Mora lo habían cerrado,
era por donde yo pasaba antes de que se construyera la autovía A 92. Pero finalmente
no hubo problemas, las máquinas quitanieves estaban prestas para dejar limpia
la autovía, y en el tiempo que tardé en la travesía no hizo falta que
intervinieran. Siguiendo la marca que dejaban los automóviles y camiones se podía conducir
bien.
Cuando llegamos al hotel y llamé a nuestra amiga surgió otro problema: Amor tenía para ese día
otros planes: su hijo mayor pilotaba un
coche en un rally que se realizaba en un pueblo a unos treinta kms de Lorca. La
carrera puntuaba para el Premio de España y ella no podía dejar de asistir al
evento, por lo que hasta la noche no podríamos verla en su casa. Al final la
sorpresa que quería darle me la llevé yo.
El problema lo solucionamos reservando una noche más en el
hotel para así poder pasar unas horas más el día siguiente con ella.
Por la mañana, mientras ella atendía las labores de su hogar, fuimos a visitar el castillo de
Lorca, llamado " La Fortaleza del Sol", y después de comer y echar
una siesta fuimos a merendar con ella.
Amor es una persona
admirable, su historia no deja indiferente a nadie, es un modelo a seguir para
enfrentarse a la adversidad sin desfallecer.
Entre todos los nombres existentes en la nomenclatura el de Amor es el más apropiado a
su personalidad, pues ella es eso: amor incondicional por los cuatro costados. Es
una verdadera amiga, de esas que "Se
quedan a tu lado cuando todos los demás se han ido, de las que conocen cada uno
de tus defectos y aún así te quieren, de las que te valoran por lo que eres y
no por lo que tienes". Es un tesoro para sus amig@s, que somos much@s. Basta
con que ella escriba en su página un
simple ¡Hola! para que se llene con cientos de comentarios y alabanzas.
Amor está escribiendo
su segundo libro. Del primero, donó todos sus beneficios a la Cruz Roja de
Lorca. Estoy deseando que lo presente al público.
Enfrentar problemas graves con entereza es muestra de carácter y fortaleza, dale un fuerte abrazo de mi parte y que siga siempre adelante.
ResponderEliminarMario
Gracias Mario. Qué más quisiera yo que darle abrazos tuyos y míos; pero vive a 500 kms. Hacía un año que no la visitaba. Un abrazo, amigo
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