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martes, octubre 15, 2024

OS RETO A ADIVINAR LOS NOMBRES DE LOS PROTAGONISTAS DE MI HISTORIA



¡Buenos días, amig@s!
Hoy me he levantado inspirado y os voy a contar una vieja historia. Os reto a descubrir quienes son los protagonistas. Vamos e ello:
Un hombre esta leyendo el Diario de Cádiz, sentado en un banco del parque, al cuidado de su hijo, un niño de seis años, que juega con un balón de reglamento heredado de su abuelo. El niño corre con el balón sobre la hierba, chuta y ... le pega en la cara a otro señor que estaba mirando el móvil en otro banco.
El móvil sale despedido y va a parar un metros más allá sobre el césped.
El señor se levanta muy cabreado, recoge el teléfono y el balón. Luego va y le arrea una bofetada al niño, que sale llorando en busca de su padre:

—Papá ese hombre me ha pegado y me ha quitado el balón.
El padre se enfada “Ese tío no tiene derecho a pegarle mi hijo. Se va a enterar”, cierra el periódico , se levanta y va al encuentro del maltratador.

—Oiga usted, como le vuelva a poner la mano encima a mi hijo, aténgase a las consecuencias. Devuélvale el balón.
El maltratador de niños se acerca al chiquillo y...le arrea otra bofetada.
—¡Pero qué hace!— grita el padre— ¡Como vuelva a hacerlo se va a enterar, sinvergüenza!

El maltratador le arrea otra bofetada más fuerte, el niño cae al suelo
El padre lo levanta y le dice:

—Vámonos, hijo, y déjale el balón porque este energúmeno es capaz de matarnos a los dos.
                                     FIN
A ver, amig@s, ¿Estáis listos? ¿Sí? Pues mencionen el nombre de cada protagonista.
¿¡Que no lo sabéis?!
Bueno, os entiendo, son las 7 de la mañana y aún estáis medio dormidos. Os cuento:
El niño se llama Palestina.
El balón es su territorio
El señor que le pega se llama Israel
El padre del niño es la Unión Europea


jueves, octubre 03, 2024

LA GRIPE ME HA INVITADO A PASAR EL FIN DE SEMANA CON ELLA

 Buenos días, amig@s!

Perdonad que apenas entre y comente o publique, mi compañera del alma me ha regalado un catarro tremendo de Segunda mano, pues también a ella algún admirador anónimo se lo entregó sin ánimo de lucro.
Ayer entré en la farmacia del barrio para comprar algún mejunje que contuviera mis excreciones y... Mejor os cuento como fue la escena:
—Buenos días , don Ramón, vengo a que...
En ese momento no pude evitar un estornudo que me causó un intenso dolor en todo el cuerpo. Cuando abrí los ojos vi al farmacéutico y su joven empleada, licenciada en prácticas, consternados observando el cristal que nos separaba y el mostrador: Los mocos chorreaban cristal abajo; el mostrador aparecía lleno de liquido viscoso...
Me limpié con un pañuelo, (con qué otra cosa me iba a limpiar ¿ein?), mientras pensaba qué les iba a decir.
No hizo falta decir nada: la joven boticaria entró en el almacén y, regresó con un frasco color marrón, lo abrió y llenó una cucharita y me la ofreció:
—Tómese esto ahora y al llegar a su casa se toma otra, No más de tres al día.
Me tomé el medicamento, que me recordó el aceite de ricino que nos daban las monjas, pagué el producto (12 euros) y me fui para casa.
Luego, gracias a una vecina mía que estaba sentada esperando a que pesaran a su bebé, me enteré de la conversación que habían tenido en la farmacia la pareja de licenciados:
—¿Qué le has dado?— preguntó el dueño
—Digestic, lo mejor para el estreñimiento
—¡¿Pero estas loca?! Lo que necesitaba el cliente es algo para la gripe.
—Venga a mirar por donde va y comprenderá.
Y se asomaron a la puerta y me vieron agarrado con una mano a la farola y con la otra pinzándome la nariz, los ojos lagrimosos... La niña bonita le dijo a su jefe:
—¿Ve usted como ya no estornuda?
Puede ser una imagen de baguette, palito de pan y texto

sábado, septiembre 28, 2024

¡ MIEDO!

 


No os lo había contado para no alarmaros, pero el otro día en el hospital de Puerto Real pasé mucho miedo. La revisión en Dermatología a mi Carmen fue bien. Pero al salir...

Resulta  que  salimos a las cinco y el autobús no venía hasta las 6 de la tarde. Estábamos cuatro personas esperando en la parada, sita a trescientos metros de la entrada al hospital. De pronto me entraron ganas de orinar y me adentré en el bosque de pinos que rodea el centro medico.

De pronto salió un hombre con los ojos desorbitados y gritó:

—¡Ahhh, sinvergüenza!  ¡Conque estabas aquí, ehhh!

Temblando de miedo salí corriendo adelante, alejándome de la parada del bus. El sujeto seguía tras de mí gritando. Pasé junto a la entrada del hospital psiquiátrico, que está detrás del  Hospital Universitario, donde nos habían atendido. Miré atrás y vi que el loco me ganaba terreno, pues era mucho más joven que yo. Me palpé el pecho, sentía los golpes acelerados de mi corazón, no podía más iba a explotar... Me dejé caer sobre la yerba.

Entonces me alcanzó el señor de los ojos saltones, se inclinó sobre mí, me tocó el hombro y me dijo:

— ¡TÚ LA LLEVAS!

Y salió corriendo mirando si yo le seguía.

domingo, septiembre 22, 2024

EL OTOÑO EMPIEZA MAL

 EL OTOÑO EMPIEZA MAL

Desde pequeño soñaba con viajar a Argentina. Cuando hice la primera comunión, hubo un jugador de fútbol argentino que le marcó un gol a España. Se llamaba Grillo. Un tío mío, que pilotaba un avión Katiuska, huyó a Argentina al terminar la guerra. Luego me hice hincha del Real Madrid y llegó Distéfano, Ryal, más recientemente Valdano y Redondo... Esos argentinos enamoraron a toda España. Y actualmente tengo varias amigas de facebok argentinas, a las que hubiera dado un brazo por poder abrazarla, aunque fuera solo con el otro. Y, hasta dos años antes de la pandemia, soñaba que iría a ver las cataratas del Iguazú con mi Carmen.
Pero, definitivamente, no será posible.
Al problema de la edad, se une mis limitaciones físicas y económicas; el precio del viaje y las 13 horas de vuelo, joder que por muy guapas que sean las azafatas son muchas horas. Pero lo que realmente me hace desistir es que me he dado cuenta de que... ¡No entiendo el idioma!
Ayer salí a tomarme una cerveza, y estando hablando con la camarera, una joven de muy buen ver, un señor que estaba al lado en la barra me dice:
— Vos no hablás como los de acá ¿Sos andaluz?
—No, Sos es aragonés, del Rey Católico, además
—Qué me hablás? Vos sos boludo
—A ver, creo que ha habido un mal entendido
—Andate a la reconcha de la lora, pelotudo
¡Yo no asimilaba el lenguaje, creía que los argentinos hablaban como yo, es un pueblo hermano!
El tipo no paraba de hablar enfurecido, sin darme tiempo a asimiliar las palabras. Intento comprender, reflexiono:
A ver: concha es la vagina de una señora, eso lo sé, y supongo que la Lora es una chica fácil y liberada muy conocida, pues me dice que vaya a verla.. No me vendría mal después de un mes de navegación.
—Dígame: ¿Dónde está esa señora?, por favor...
—¿De qué señora hablás?
—De la Lora
—¡¡Pero vos sos un gran pelutudo. Vos me vas a chupar un huevo, remierda!!
Algo no va bien —pensé —, la cosa se complica. Mejor me voy a casa.
Y me fui tarareando la canción. “ No llores por mí Argentina.....”
Puede ser una imagen de 3 personas y cerveza
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domingo, agosto 18, 2024

EL CALOR VERANIEGO


 

¡Buenos días, amig@s!

Después de una noche calurosa, debemos prepararnos para un día de intenso calor. Aquí en El Puerto llegaremos a los 35º, según las previsiones oficiales. Peor lo están pasando en otros lugares; los errores se pagan.

Me refiero a que en la década de los 80 y 90 los gobiernos locales, regionales y el de la nación apostaron por el turismo como fuente principal de ingresos, cerrando fábricas e industrias,  dejando a cientos de miles de obreros especializados en el paro y promocionando escuelas de hostelería. De tal forma que se llegan a ver a especialista metalúrgicos, a  ingenieros y otr@s licenciad@s ejerciendo de camarer@s.

El programa fue un éxito total, y los turistas acuden en masa inundando las ciudades y playas y copando los hoteles y pisos en alquiler de tal forma que en ciudades de veinte mil habitantes han duplicado su población y ahora vemos en los telediarios que no hay agua para todos, que a mayor demanda los precios de los alimentos y hospedaje suben desmesuradamente, y que hay alcaldes que piden a los lugareños “que no salgan de casa para dejar paso libre a los visitantes”. ¡OLE ahí ese alcalde! Entrega todo un pueblo a los turistas que  dejan dinero en sus comercios, mientras a sus votantes les queda el dudoso honor de pagar el coste de la limpieza y el de las   infraestructuras. Se lo tienen merecido por haberle votado.

Estas cosas  tranquilizan  mi conciencia  de no haber votado en ninguna de las últimas elecciones, sean locales, regionales, nacionales y europeas, pues ya sabía yo por experiencia, que  esta gentuza solo piensa en sí mismo y no en los ciudadanos que les votan. Que sirva de lección a quienes están sufriendo cortes de agua y saturación desmesurada en lugares públicos.

En otro orden de cosas, os informo que el viernes pasado, como hacía cada día, di de comer a mi pichoncito y sobre las nueve se fue volando y no ha regresado, poniendo punto y final al proceso de construcción del nido, puesta del huevo, nacimiento y crianza del pajarito.

Por un lado me siento feliz de que se haya emancipado; por otro, siento nostalgia de su presencia. Me preocupaba cómo iba él a defenderse de las rapaces que veo cruzar la plaza, de su alimentación y de la aceptación en la bandada de palomas que habitan la barriada. Pero me reconfortan las palabras que dirigió el Gran Maestro a sus apóstoles, plasmadas en La Biblia, el libro más vendido del mundo:

“ No os preocupéis por el día de mañana ni de qué vais a comer y donde dormir; fijaos en las aves del campo: ellas no siembran ni cultivan ni se hacen ropas ni construyen casas; pero os aseguro que no les falta de nada: El Creador sabe qué necesitan y lo provee, y ni el rey Salomón vistió  con ropajes tan bonitos como sus plumajes”. Evangelio de S. Mateo, cap 6. Vers. 25—34

 

domingo, julio 28, 2024

LOS JUEGOS OLÍMPICOS DE PARÍS.

 Imagen de la red, ignoro su autor




Ayer, sobre las 8 de la tarde, irrumpió espectacularmente en la orilla del Sena un corredor de la prueba del maratón. Un enjambre de reporteros se abalanzó sobre el deportista, un abuelo centenario, para interrogarle.

—Oiga señor, ¿Qué hace usted corriendo si aún no han comenzado las pruebas? Hoy toca la presentación de los Juegos...

—Acabo de llegar, Supongo que los demás participantes han llegado antes.

—¿Pero de qué participantes habla, señor?

— De los que salimos en el maratón de los Juegos Olímpicos de París en 1924

Última hora: varios periodistas , empujándose unos a otros por sacar la mejor foto, se cayeron ayer al río Sena. Solo cinco han sido rescatados

miércoles, julio 17, 2024

A MITAD DE JULIO

 



¡Buenos días, amig@s! Estamos a mitad de semana, y lo siento por quienes han venido a disfrutar de ella por vacaciones. Tranquilos, no es nada personal, es el sistema. Todo se acaba, lo bueno y lo malo, y a ustedes les ha tocado ir pensando en el regreso a casa recordando el privilegiado clima de este lugar y dejando para los empleados públicos, que pagamos los ciudadanos locales,  el recoger las toneladas de basura que cada amanecer aparecen en nuestras playas. ¡Y éstas  no son excrementos  de perros!

En fin, la vida sigue independientemente de la educación urbana y respeto que cada cual tenga por los demás, y la Naturales y el Medio Ambiente.

Ayer, la Bahía de Cádiz fue la protagonista: en cada una de sus ciudades costeras pasearon en barco a la Virgen del Carmen, patrona de los marineros, lo cual produjo el lleno de bares y restaurantes del entorno y no se podía ni reservar  mesa.

En otro orden de cosas, mi pequeño pichón sigue creciendo entre mis macetas.  La madre ya no se queda quieta las 24 horas sobre el huevo y el polluelo. Ahora pasa más tiempo buscando comida en el campo para traérsela a su hijito, que en el nido.

 En solo una semana, mi pequeño okupa ha duplicado su tamaño, y pienso que en dos semanas  más ya se habrá ido con la madre a conocer mundo, si antes no se cae a la calle y la «generosidad» de la gente y sus mascotas no acaban con su vida. Yo le he puesto una pequeña red enfrente  para que lo retenga en caso de que se resbale por la pendiente del alféizar; pero no confío mucho en ella porque la madre, al entrar y salir, la pisa y baja la altura de protección.

En fin, tampoco puedo hacer mucho más porque si la paloma nota que estoy manipulando su espacio es capaz de irse y abandonar al polluelo.

Confío en las palabras del Maestro Jesús: «Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta.» Mateo 6:26 

 

 

 

domingo, junio 09, 2024

PAZ EN PALESTINA

 


PAZ EN PALESTINA

Por donde pasa Israel
no vuelve a crecer la hierba
¡No obedecen ni a la ONU!
El Tío Sam apadrina su guerra.

Las nubes de polvo y humo
llevan almas inocentes
de ancianos mujeres, niños...
que mueren impunemente.

Gaza ya es un gran desierto
ruinas, sequía y polvo
ocultan miles de muertos.
Las banderas de Judea
presiden los cementerios.

Mas a Europa le da igual
se ciega ante el genocidio,
solo piensa en su bienestar
y en sus juegos olímpicos.

Y mientras en los despachos
se rifan la reconstrucción,
miles de niños inocentes
son asesinados sin perdón.

¡Por una Palestina Libre!

©Juan Pan García

COSTILLITAS DE CERDO

 




A petición de mi amiga TT MARTI, natural de Montevideo, pintora muy reconocida por decenas de exposiciones en varias ciudades y centros culturales argentinos, y gran bailadora de tangos, con varios premios en su haber, les escribo aquí la receta de las costillas que mi Carmen me regaló ayer:

Ingredientes: costillas de cerdo troceadas, aceite de oliva, agua, ajo, pimentón rojo dulce, laurel, sal.

En una sartén se echa un poco de aceite. Se añaden las costillas con un poco de sal por encima. Y se van friendo las costillas.

Cuando estén un poco doradas se le añade ajo con la piel y partidos por la mitad, una hoja de laurel y un poco de pimentón rojo dulce. Se remueve todo con cuidado de que no se queme el pimentón.

Se agrega medio litro de agua, Si cuando se consuma ese agua las costillas siguen un poco duras, se le añade un poco más de agua, así hasta  que las costillas se pongan bien tiernas. Cuando estén a gusto se deja consumir el caldo

jueves, junio 06, 2024

PEDIDA DE MANO

 


 ¡Buenos días, amig@s!

Acabo de venir del supermercado El jamón donde me he encontrado a Miguelito, el hijo de mi vecino Eusebio.

Me ha dejado pasmado con la historia que me ha contado. El sinvergüenza confiesa que ha grabado la conversación que ha mantenido con los padres de la Luisa, la joven que sale con él desde la pasada Nochebuena.

Pero hombre, ¿le has pedido permiso para grabar? Eso está prohibido compartirlo en las redes...

Es para que no  me se olvide, y por si luego ellos se echan para atrás.

 ¿Para atrás de qué?

 De lo que hemos hablado y acordado

 ¿Y se puede saber qué?

 Pues mira, señor Juan, a usted se lo envío por wassap cuando llegue a mi casa para que lo escuche y me aconseje luego, que mi padre le aprecia mucho porque usted ha estudiao.

 Pues vale, chaval. Ya te diré.

Y aquí estoy ante la pantalla del ordenador en blanco sin saber si debo contarlo aunque me tilden de chismoso, o guardar el secreto. Pero como sé que el Miguelito no solo ha compartido la grabación conmigo, ¡si lo conoceré yo!, os lo voy a contar todo.

 La grabación empieza así:

“Ringgg, ring....”

Se escuchan pasos y se abre una puerta. El dueño de la casa mira a Miguel de abajo arriba y a la inversa (esto no está grabado pero me lo imagino viendo el aspecto de Miguel) y dice con el ceño fruncido:

¿Qué desea?

Pues que... Yo venía a pedirle la mano de su hija, la quiero mucho y queremos casarnos.

¡¿ PERO QUÉ DICES, IDIOTA?!

 Óiga usted, que yo no le he faltado al respeto.

 ¿Y para qué quieres su mano, qué vas a hacer con ella?

Yo nada, es su mano la que va a tener mucho que hacerme.

 ¿Mi mano?

 No, la de su hija, que ya es una experta.

 ¿Experta, so gilipollas...? ¿Pero tú estás capacitado para fundar un hogar y sacar a una familia adelante?

 Por supuesto, yo sirvo para todo, hago lo que haga falta.

 A ver: ¿A qué te dedicas? ¿A jugar a las cartas en el bar o a aparcar coches delante del hospital?

Eso lo hacía antes de conocer a su hija; ahora voy a trabajar en serio en una empresa.

¿En una empresa? ¡Pero quién te va a querer dar trabajo a ti, si no sirves ni para lavar los platos en un restaurante!

En esto se oye la voz de una mujer:

   Deja en paz al chico, Manolo, que todos tienen derecho al trabajo y a la vida.

—Pero si es un tarado, ¿no lo ves? No sirve para nada.

¡Sí que sirvo, pregúntele a su mujer!

 ¿A mi mujer? ¡Qué sabrá ella!

Pues sí que lo sé, Manolo: el chico vale para algunas cosas más que muchos hombres. Doy fe. Por eso he hablado con el gerente del hotel Luna, que es muy apañao, y lo van a llamar para contratarlo por la temporada veraniega.

 ¿Y tú que tienes que ver con este, Lola? Qué te importará  a ti si trabaja o no...

Pue sí, me importa. Ellos se quieren y hay que darles una oportunidad. El chaval, si trabaja y le pagan  un sueldo digno es capaz de fundar un hogar y criar una familia. Para eso está bien preparado. Al principio le costará, como te costó a ti cuando nos casamos; pero luego todo irá bien, ya me encargo yo de enseñarlo a llevar una casa pa lante.

 ¿Pero y si la deja preñada y nos da un nieto tarado como  él?

 ¿Tarado? Ojalá el nieto esté tan bien dotado como el chico. ¿No notas el paquete?

 ¡Pero Lola, qué me dices! ¿Que sabes tú de su dote que no me hayas contado? Yo me refería a la cabeza.

La cabeza, a eso me refiero. El otro día en la playa salió del agua y se le salió la cabeza por debajo del bañador ¡Madre mía, qué cosa! Las mujeres que tomaban el sol en las tumbonas le sacaban fotos con disimulo, incluso la Mari y la Isabelita, la mujer del picoleto,  lo llamaron y le invitaron a un gintonic. ¡Ay, Dios del amor hermoso!, ¿por qué le das pañuelos a quienes  no tienen mocos? Desde que supe que la niña lo quería, comprendí que al chaval había que darle una oportunidad y  ayudarle en lo que fuere necesario para demostrar su valía.

Bueno, entonces que hago con la mano de tu hija: ¿Se la corto y se la doy  a este? ¡Vaya plan, con lo bien que estábamos!

De cortar nada, Manolo,  que todos nuestros miembros son necesarios. Que se comprometan y nosotros vamos preparando la boda para el año que viene.

La preparas tú, que eres tan entusiasta y lista. A mí no me saca este ni un euro.

Se oye un portazo.

—No te preocupes , mi niño. Entre mi hija y yo, te convertiremos en un hombre  trabajador y feliz.

Fin de la grabación.

A ver ahora qué le aconsejo yo al Miguelito.  Como no me ofrezca a la Lola para colaborar en el proyecto... No sé, no sé.

© Juan Pan García 6 del 6 de2024 Día del Desembarco de los Aliados