martes, agosto 23, 2011

Y AL TERCER AÑO....

Añadir imagenEn estos últimos días he releído un libro comprado hace 33 años en vez de gastarme los cuartos en uno nuevo. Y esta pasada madrugada he iniciado la lectura en mi PC. de la nueva novela "Morituri", de Francisco Gijón. La he conseguido gratis, simplemente inscribiéndome en 24symbols. Eso es lo que tendré que hacer a partir de ahora, pues, si nos congelan las pensiones al mismo tiempo que nos suben los precios y nos recortan derechos fundamentales, poco dinero nos queda para dedicar al ocio.

El libro que acabo de leer no tiene desperdicio. Es una obra de ficción protagonizada por personajes reales de la política española, escrita con un humor amable aunque mordaz y corrosivo, que al tiempo que hace reír, remueve las entrañas y transmite un cierto pánico ante la deriva que está tomando el sistema, pues se reproducen las mismas circunstancias que conocimos en la primera crisis de la era democrática, allá por el año 1977, que tan fielmente describe el autor en esta novela: «... Y al tercer año, resucitó», de Fernando Vizcaíno Casas.

El sacristán del Valle de los Caídos, borracho empedernido, se levanta una mañana y encuentra la tumba de Franco abierta y vacía. Corre a ver al padre superior gritando: ¡Ha resucitado, ha resucitado! Y el monaguillo, que es hijo de comunistas, telefonea a su padre y le da el aviso. ¡Y el caos está servido!

Santiago Carrillo rebusca en el armario su peluca y ordena a su mayordomo hacer la maleta y sacarle el billete para Rusia; la Pasionaria hace lo mismo, pero le dice a su comunicante que no le diga nada a Carrillo, para ver si así lo cogen y lo pierde de vista. Suarez, Martín Villa, Pujol, Aranguren... Todos los demócratas sacan la foto de Franco del armario y la ponen en lugar de la del Rey; Felipe González pide protección a Willy Brandt...

El autor narra la historia de cada personaje antes y después de la muerte de Franco y causa pasmo la cantidad de trabajo que debieron tener sus respectivos sastres para poder “cambiar de chaqueta” tantas veces. Por ejemplo, basta comparar la declaración de un Carrillo envalentonado ante la inminente muerte del dictador y su actual posición ante la Monarquía, asistiendo a la boda de las infantas y del Príncipe y festejando con ellos diferentes acontecimientos.

.... España cuenta en 1978 con más de medio millón de parados, cosa inimaginable tres años antes; en Granada supera el 24% y la gente es asaltada en las calles, los familias llenan sus cestas en los hipermercados y se van sin pagar; la bolsa se hunde y cada día cierran nuevas empresas. Las huelgas se suceden a diario; todos quieren hacer su huelga: los pilotos, los funcionarios, las putas, los carteros, los barrenderos, los maestros... Incluso el Gobierno, para no ser menos que los gobernados, se declara en huelga durante 11 días, ¡y es justamente entonces que todo funciona y la bolsa sube!

El día 20 de noviembre, fecha del 3º aniversario de la muerte de Franco, un millar de fascistas acudía cada año a la plaza de Oriente a homenajearlo; pero el año 1978 la noticia de la resurrección del dictador ha corrido como la pólvora y son más de un millón de personas los que ocupan la plaza y todas las calles aledañas. ¿Qué pasará? ¿Saldrá Franco a saludar desde el balcón?

Es éste un libro muy ameno. Creo que toda persona que haya conocido la época de los años 70 agradecería su lectura.


12 comentarios:

  1. Pues si que parece interesante el libro Juan, me lo anoto para la lista de libros pendientes. Gracias por la recomendación.
    Te dejo un cariñoso y caluroso abrazo

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  2. Hola Juan,

    es una época que me pilla por los pelos, soy del 79, pero parece tener buena pinta. Lo malo es que será difícil de conseguir 33 años después, ¿no?
    Con respecto a lo de 24Symbols comienza a tener buena pinta.
    Un abrazo.

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  3. No he tenido nunca demasiado interés en la literatura de Vizcaíno Casas, quizá porque parecía más franquista que el mismo Franco. De todos modos la crítica hablaba bien de sus obras. Y el tema de esta es para descojonarse, pero no sé, no sé...

    Un abrazo

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  4. Me alegro que estes leyendo libros en pdf.

    Un beso
    Flor

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  5. Hola, Belkis, gracias por tu visita. El libro lo he visto en algunos estantes de libros de ocasión, es difícil hallarlo en las librerías porque fue publicado hace muchos años. Te reírás mucho si lo lees. Un beso

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  6. Hola, Jesús, me alegro de verte por aquí. Tal como le digo a Belkis, es difícil encontrar el libro. Pero recuerdo haberlo visto el Día del Libro en las casetas de libros que se ven en los parques y en las librerías de ocasión.
    Lo de 24symbols es una buena opción para nosotros los noveles.Estoy en ello. Un abrazo

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  7. Juan Risueño, tienes toda la razón: Vizcaíno no sólo lo parece sino que es más franquista que Franco y arrima siempre el ascua a su sardina. Pero no deja de ser un buen escritor que vendía un millón de ejemplares en 1978, y cuyos análisis corrosivos de los salvapatrias nostálgicos y los iluminados socialistos y comunistos que(él aún no lo sabía cuando escribió su trilogía)llevan en el Parlamento casi tanto tiempo como el Dictador sin otro quehacer que llenarse los bolsillos,dibujan una sonrisa permanente en la cara del lector, que disfruta con las escenas surrealistas que describe. Un abrazo.

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  8. ¡Te alegras, Flor? ¿Por qué? Te animo a que tú también lo hags: es más barato y de todas formas estamos pegados al PC leyendo todo el día.
    En 24 symbols es gratis, sólo se requiere apuntarse. Un beso

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  9. Juan parece interesante este libro que pase buen fin de semana
    Un cordial saludo

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  10. Gracias, José Ramón, lo mismo te deseo.Saludos.

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  11. Para quienes vivieron ese tormento de Franco debe ser bueno leerlo y si es ameno mejor.

    hasta pronto Mario

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  12. Mi querido Juan.....! pero que bien lo escribes! Bueno, esa novela no la he leído, pero a Vizcaíno Casas hay que reconocerle su buena pluma y su ineligencia....Y me parece buena idea releer lo que nos gustó en su momento, y gracias por la dirección de la página.
    Mil estrellitas que te refrescan muchísimo
    Sherezade

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