lunes, abril 06, 2009

"NOVIEMBRE" en el Teatro Pedro Muñoz Seca.



NOVIEMBRE.
Hay mucha actividad en el despacho oval de la Casa Blanca.
A una semana de las elecciones el Presidente de los Estados Unidos, que sabe que las encuestas le dan por perdedor y su partido y los grandes financiadores ya le han quitado su apoyo y le exigen llamándole por teléfono cada tres minutos que abandone la Casa Blanca, le pide a su secretaria —una joven guapa, moderna e inteligente capaz de escribir discursos tan bellos y tiernos que lo llevaron al poder cuatro años antes y pueden ahora cambiar el voto de los electores—, que, por favor, le escriba algo que le permita permanecer en su puesto.
La secretaria, que es lesbiana, le pide a cambio que él mismo la case ante las cámaras de televisión antes de pronunciar el discurso, y le asegura que a pesar de las encuestas hará cambiar el voto a favor. El presidente accede a todo con tal de seguir en el sillón, pero su consejero personal le dice que eso de casar lesbianas es contrario a la Constitución.
El Presidente alega que en casos especiales él tiene potestad de hacer lo que le venga en gana, aún en contra de la Carta Magna; la secretaria le apoya diciendo que Linlcon pasó a la Historia por abolir la esclavitud y él pasará a la Historia por aprobar el matrimonio entre homosexuales, pasando ella también a la Historia por ser la primera mujer que se benefició de ese derecho.
Por otro lado, y en medio del debate, el teléfono privado no cesa de sonar: es su mujer, que no quiere irse con las manos vacías e insta a su marido a llevarse el sofá del despacho, ya que ella lo mandó tapizar a su gusto. El Presidente le pide a su consejero se encargue de que le construyan una biblioteca como la de la Casa Blanca y que la llene con los libros que le gustan. El sofá hace juego con los muebles, argumenta su esposa.
El presidente de la Fundación Nacional del Pavo entra para pedirle que, tal como manda la tradición, indulte a dos pavos en el Día de Acción de Gracias, la fiesta más celebrada en EE.UU., pero no se saldrá con la suya a menos que pague 200 millones de dólares de comisión al Presidente, que no quiere irse con las manos vacías. Ante la negativa a entregarle el dinero, el Presidente amenaza con cambiar la tradición de comer pavo ese día y promocionar el cerdo. El consejero dice que eso sería una provocación a los musulmanes, y que no está el horno para bollos. Tras varias horas de tira y afloja el presidente de la Fundación del Pavo acepta pagar, pero en ese momento los pavos pierden el conocimiento debido a que han sido atacados por el virus asiático conocido por la Gripe del Pollo, que les ha contagiado la lesbiana, quien acababa de llegar de China
cuando la llamó el Presidente.
La esposa del Presidente no cesa de interrumpir las negociaciones con sus llamadas telefónicas y él, para que lo deje tranquilo, le dice que no le moleste porque están en guerra con Irán y ha mandado lanzarles un misil. La esposa se lo dice a sus amigas y sale la noticia en los telediarios. Irán, que no sabe nada, acusa a EEUU de provocación, los generales del Pentágono piden una explicación….
El jefe de una reserva india, que controla el voto de más de un millón de indígenas, le pide una isla para construir el mayor casino del mundo a cambio de darle su apoyo.
¿Y qué gano yo? ¡Tengo que robar, soy el Presidente!, responde.
Divertidísima la escena donde la secretaria y el Presidente intercambian insultos barriobajeros y se echan en cara favores anteriores.
Una obra genial, que durante una hora y cuarenta minutos nos mantuvo la sonrisa en los labios y provocó varias carcajadas en el público que llenaba el teatro. Una crítica sarcástica a la corrupción que acompaña al poder y a los tejemanejes de los políticos para conservarlo.
Admirable la actuación de Santiago Ramos, el “Presidente”, ya que NOVIEMBRE es casi un monólogo, y, contrariamente a los otros actores, que entran y salen, él permanece en el escenario durante toda la representación, y uno se asombra ante su prodigiosa memoria.
Magnífica, la interpretación de los cinco actores. Fue un espectáculo muy bueno que, estoy seguro, recordaré siempre.

4 comentarios:

  1. Tiene pinta de ser una obra magnifica y parece que te lo pasaste estupendamente.
    Un teatro lleno de gente y de risas es una imagen muy evocadora para mi.
    Saludos.

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  2. "Un teatro lleno de gente y de risas es una imagen muy evocadora para mi."

    Seguro que sí, Lola,dado que fuiste actriz en Madrid.
    Un placer verte por aquí a pesar de tus ocupaciones. Se agradece.
    Un beso.

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  3. ¡Buenas, Juan!

    Me alegro de que lo pasaras tan bien y disfrutaras de esa obra. La verdad es que, como dice Lola Mariné, tiene pinta de estar muy bien.

    Siento no poder pasarme tanto como quisiera, ¡pero estudio hasta en vacaciones! Entre eso y que salgo a ver alguna procesión... Apenas consigo publicar algo. Hoy he aprovechado un rato antes de salir;)

    ¡Un abrazo, amigo!

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  4. Gracias por venir, Lady Luna.la verdad es que lo pasé muy bien. El día 18 iré a ver otra obra, que se llama "Cantando bajo las balas". No creo que me guste tanto porque va de cante, como de opereta, pero a mi mujer sí le gustan.
    Que disfrutes de la Semana Santa sevillana. Un beso.

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